¡Vuelve la Fiesta de los Patios de Córdoba!

Un año más, viajamos a Córdoba del 2 al 12 de mayo para movernos de flor en flor por sus espectaculares patios.
Fiesta de los Patios de Córdoba patio cordobs
Dusko Despotovic/Getty Images

Prepara el mapa y, sobre todo, la cámara, porque la Fiesta de los Patios de Córdoba está de vuelta. Dice el refrán: “A abril con sus chaparrones, sigue mayo con sus flores”, y la ciudad andaluza se lo ha tomado al pie de la letra. Del 2 al 12 de mayo, Córdoba se pone sus mejores galas para demostrar que la primavera florece entre sus callejas.

El famoso concurso de los patios comenzó a celebrarse en 1921 y desde entonces, Córdoba solo ha recibido halagos. Turistas y locales se reúnen en los núcleos de casas particulares, herederos de la casa islámica, allí donde se han sucedido los mejores momentos familiares al aire libre.

San Basilio, 14 (Ruta Alcázar Viejo), patio de arquitectura antigua.

Fiesta de los Patios de Córdoba

Como cada año, el concurso está dividido en diferentes rutas que sacan a la palestra algunos de los patios más espectaculares de la ciudad, por algo fueron declarados Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en 2012. Un total de seis recorridos conforman la programación de esta edición en los que se cuelan patios de arquitectura moderna y antigua.

La ruta del Alcazar Viejo, ocupa principalmente la calle San Basilio. En ella, los maceteros tradicionales y azules se agolpan en las paredes y sobre el pavimento chino cordobés. Muy cerca de ella, hacia el centro histórico de la ciudad, nos encontramos con la ruta de la Judería, de las más largas en cuanto a extensión.

Andando por las callejas de esta última, nos topamos también con numerosos patios fuera de concurso, como el de la sede de la Subdelegación de Defensa de Córdoba, situado en el antiguo palacio de los Venegas de Henestrosa, del siglo XVI. Aquí, todo gira en torno a su fuente principal de azulejos, arcos colmados de jazmines de estrella o su magnolio centenario.

Patio de la Subdelegación de Defensa (Plaza Ramón y Cajal), fuera de concurso.

Fiesta de los Patios de Córdoba

A medida que se sigue la ruta de la Judería, si nos desviamos hacia Medilla y Corella, 5, nos toparemos con el patio de la Filmoteca de Andalucía, también fuera de concurso, la Casa Árabe (Samuel de los Santos Gener, 9), el del Archivo Histórico Provincial de Córdoba (Pompeyos, 6), el del Colegio La Piedad (Plaza de las Cañas, 3) o el del Museo Julio Romero de Torres y de Bellas Artes (Plaza del Potro).

La ruta de Santiago-San Pedro, Regina Realejo, Santa Marina-San Agustín y San Lorenzo completan el resto de posibles caminos a seguir. Su cercanía permite saltar de uno a otro en un largo paseo en el que la vista y el olfato serán los dos sentidos ganadores. Aquí también se podrán encontrar algunos patios fuera de concurso, como el del Palacio de Viana, o el de la vivienda de Trueque, 4, considerado el Centro Cultural Inmaterial de los Patios de Córdoba.

MÁS ALLÁ DE LOS PATIOS

No podemos olvidarnos de que, detrás de la explosión floral, los muebles antiguos y los enseres de cocina como decoración, hay propietarios que han dedicado todos sus cuidados a hacer de sus patios casi un museo. Aparte del respeto necesario a la hora de visitar sus viviendas, estas figuras cuentan con esculturas por toda la ciudad que rinden homenaje a su trabajo.

Tafures, 2 (Ruta Sta. Marina - St. Agustín), patio de arquitectura moderna.

Fiesta de los Patios de Córdoba

Una de las más populares es La Regadora, en la Plaza Puerta del Rincón. Una mujer en bronce riega cuidadosamente sus plantas con una caña y una lata. Con un puñado de jazmines en su peinado, las zapatillas y los pendientes –zarcillos, para hacer justicia a la jerga– se hace un guiño también a la marroquinería y joyería cordobesa.

Ver fotos: Córdoba y sus patios, un paseo lleno de nostalgia

En la Plaza de Manuel Garrido Moreno, el pasado y el futuro parecen abrazarse en la escultura del Abuelo y Niño, una referencia a una tradición trascendental que traspasa generaciones. Y la esencia familiar culmina con El Pozo de las Flores, en la Plaza Poeta Juan Bernier. Aquí, una abuela y su nieta permanecen sentadas junto a un pozo en el que se trasplantan esquejes y se limpian las hojas marchitas.

La Regadora es una parada imprescindible.

Manoli Perez / Alamy Stock Photo

NO SOLO ARQUITECTURA

Sobre el papel –o sobre el cemento, mejor dicho– un patio es un lugar dedicado a la iluminación y ventilación de la casa a la que pertenece. Esta definición se hace aún más fuerte si tenemos en cuenta que hablamos de la calurosa Córdoba.

Sin embargo, un patio se acaba convirtiendo en el alma de un hogar, especialmente en los pueblos andaluces, donde son habituales y necesarios. Aquí, no solo se riegan las plantas, las abuelas cuentan sus historias sentadas en sillas de enea, las ristras de pimientos secos forman parte de la decoración y las mejores comidas familiares se dan entre azulejos de colores.

La Fiesta de los Patios de Córdoba es una fecha señalada que ha traspasado la fronteras andaluzas y un motivo más para poner rumbo a la ciudad. Un año más, y los que queden, sus habitantes reafirman que la verdadera belleza está en el interior.